Recientemente han muerto varias
personas de renombre. Robin Williams famoso actor de Hollywood, se suicidó hace
unas semanas. Emilio Botín artífice del crecimiento y expansión del Banco
Santander falleció hace unos días y poco después Isidoro Álvarez, otra persona
que ha hecho crecer su empresa hasta límites insospechados cuando la cogió. A
todos ellos se les atribuye el haber alcanzado el éxito. Si preguntas a nivel
histórico sobre personajes con éxito, la gente te dirá: Julio César, Alejandro
Mágno, Napoleón…También hace poco, leí un
artículo de una famosísima entrenadora personal americana. Lleva muchos años
encumbrando directivos. Comentaba que a muchos de ellos les había acompañado a
lo más alto, pero nunca era suficiente, incluso cuando eran los CEOs de
importantes empresas, decidían cambiar de sector.
En una reunión de negocios con
personas de otros países, que resultó transcurrir con una dinámica poco
habitual, se habló mucho de valores y de las distintas religiones. Una de las
personas con más peso preguntó: “¿Qué es para vosotros el éxito?” Si preguntáis
lo mismo a alguien, veréis que casi nadie responde inmediatamente. Todos los
ojos se van al techo, lo cual indica que nos lo pensamos antes de contestar. Es
una pregunta con miga y que nadie acierta a decir una definición común y
rotunda. Hablamos de ÉXITO con mayúsculas, éxito en la vida, no de éxito en el
trabajo, con las chica/os, en el deporte, etc. ¿No os parece raro el que no nos
paremos a pensar en ello siendo fundamental?
El diccionario de RAE en su
primera acepción define Éxito como “Resultado feliz de un negocio, actuación,
etc” y su segunda acepción “Buena aceptación que tiene alguien o algo”. A nivel
popular, solemos hablar de “Tener” o “Ser” (en el sentido de posición). Os daré mi definición:
“Éxito es ser feliz e inmortal. La clave: dar” (Diego Lias, filósofo de pacotilla)
Te habrás quedado tan a gusto,
pensaréis algunos. Luego no me saquéis la frase de contexto y digáis que estoy
a favor de ser vampiro. Os explico la teoría:
Feliz.
Lo dice incluso La RAE en su
definición, Feliz. El Sr. Williams se suicidó, obviamente no era feliz. Parece
que incluso buscó la felicidad en sitios donde no reside, como el alcohol y las
drogas. Julio Cesar murió asesinado por los suyos… Conversando con un amigo
sobre la muerte del Sr. Botín, yo comentaba que qué lástima que trabajara tanto
y no hubiera disfrutado de lo que tenía. Había muerto sin dejar de trabajar en
jornadas maratonianas a una edad a la que la gente suele estar jubilada. Me
dijo algo que me hizo reflexionar “Seguramente a él ya no le importaba el
dinero ni la posición, su gran pasión y lo que le hacía feliz era su gran
proyecto del Banco Santander” no sé si estaba en lo cierto, pero si me hizo
pensar. Mi forma de ver la felicidad puede no coincidir con la de los demás. A
veces nos empecinamos en transmitir que para tener éxito, para ser feliz,
tenemos que ser o hacer. Nos lo dice la sociedad, pero también se lo
transmitimos nosotros mismos a nuestros hijos. Queremos que tengan “éxito” y
les empujamos a cosas que no quieren hacer. Todo porque su padre y su abuelo
fueron o porque yo soy y no quiero que sea. Es cierto que en determinados
momentos, su juventud y falta de madurez nos puede hacer aconsejarles, ver sus
potencialidades y ayudarles a desarrollarlos para que cuando decidan su destino,
sea una decisión propia pero reflexionada. Al final, es importante que tomen
sus decisiones, el que les guste su vida, será su felicidad.
Buscamos el éxito a costa de sacrificar
lo que sea para llegar a él, dejando cadáveres y nuestra propia alma por el
camino para luego llegar, como esos CEO de éxito, al espejismo y ver que allí
no estaba la felicidad. Cada uno tiene su forma de ser feliz, pero en mi
opinión la felicidad está en dar y lo que es casi lo mismo, compartir. ¿De qué
te sirve Tener o Ser y no puedes compartir o dar? No hablamos de dinero.
Hablamos de pensar en los demás y en qué puedes aportarles. Es más, cuanto más
Seas o Tengas, tu obligación es mayor, porque tu potencial es mayor. Si eres
inteligente, tienes posición social, una habilidad especial, poder,
posibilidades… ¿Qué estas aportando a tus compañeros de trabajo? A lo mejor
durante esta crisis, tus esfuerzos y malos ratos han ayudado a que la gente que
te ha dado trabajo no pierda su empresa y a que tus compañeros puedan
seguir teniendo un sitio donde ir a trabajar. ¿Te sientes orgulloso? Sentirse
orgulloso te hace feliz. Eso es éxito. Compartir el trabajo de casa y hacer más
fácil la vida en común, dando un poco de tu libertad, contribuye a ver a los
demás felices y eso te hace feliz. Eso es éxito. Trabajar en miles de cosas
pequeñas del día a día que contribuyen a hacer felices y a mejorar la vida de
los demás, te hace feliz. También compartir conocimiento, alegrías, y las
penas, apoyar a los que lo necesitan en los momentos duros, te hace feliz y un
triunfador ¿Quién no quiere tener un amigo como tu al lado? ¡Sigue! Sigue pensando
en todas las cosas que dando o compartiendo te hacen feliz de verdad, verás que
también te hacen un triunfador.
Inmortal.
Mucha gente ha buscado el éxito
como sinónimo de inmortalidad, pasar a la posteridad. Al final, la segunda
definición de La RAE “tener buena aceptación”. Un reconocimiento, y si es
posible, que dure por los siglos de los siglos. Algunos de los que he
mencionado lo han conseguido. Para el resto de los mortales, sólo queda el
olvido. En dos generaciones se habrán olvidado de nosotros y sólo seremos polvo
en el viento. Pues esto que he dicho, no es cierto. Todos estamos llamados a
alcanzar la inmortalidad. En Gladiator, Máximo dice: “lo que hacemos en la vida
tiene su eco en la eternidad”. Estamos programados para transmitir nuestro ADN
para que nuestra especie perdure, no es lo único importante. Lo importante es
que con cada acción que realizamos, con cada frase que decimos, con cada
ejemplo que damos, con cada conocimiento que trasmitimos y mejoramos, con cada
valor que mostramos, dejamos nuestra impronta en los demás. No sólo se
transmitirá, sino que puede que sea el germen de grandes cosas. Todo importa,
cada acción. Hay frases que me han dicho que han marcado mi vida. Probablemente
el que la dijo ni se acuerda. Quien dice frases, dice hechos y acciones. El
conjunto de todo esto que se trasmite, incluyendo el arte, literatura, etc.,
conforma La Humanidad. Todas las grandes cosas provienen de pequeñas, hasta las
grandes ideas comenzaron con un germen. No te creas poco importante. Una
semilla aunque pequeña puede ser importante, lo que lleva dentro, dará su fruto.
Es nuestra obligación, que las semillas que dejamos, sean capaces de dar frutos
hermosos. Entonces seremos inmortales.
Hablad con la gente que se ha
jubilado y preguntad que ha sido lo importante de su vida ahora que, en teoría y según el concepto generalizado, no pueden perseguir el Éxito. Veréis que su
búsqueda no ha terminado y ven con más claridad lo que os he dicho. Siguen en
busca de la felicidad y la inmortalidad, aunque ya no “trabajen”, ¿O no están ahí ayudando en todo lo que pueden y transmitiendo cada día? No busques el
éxito en “Ser” y “Tener”, es un espejismo. Sed felices a través de hacer
felices a los demás. Esforzaos cada día al máximo, hasta en las cosas más
pequeñas. Romped los límites de vuestros propios límites. Con un trabajo bien
hecho del que os sintáis orgullosos, construyendo y haciendo para vosotros,
pero también para otros. Compartid, dad y transmitid, todo lo bueno que lleváis
en vuestro interior. En “Salvad al soldado Ryan” el mensaje queda perfectamente
dicho al final. Rayan, ya mayor y acompañado de toda su familia en el
cementerio, hablando a la tumba del Capitan Miller: “He intentando vivir mi
vida lo mejor posible…y haber sido digno y merecedor de cuanto se ha hecho por
mí. (a su mujer) Dime que he vivido dignamente, que soy una buena persona. (Su
mujer) Lo eres”. Cuando llegues al final y mires hacia atrás ¿Habrás sido
feliz? ¿Te habrás hecho merecedor de todo cuanto se ha hecho por ti dando el
200%? ¿Qué habrás dejado para la posteridad que te haga ser inmortal? ¿Qué fue
el Éxito? ¿Lo alcanzaste? ¡No te des cuenta de lo que es el éxito cuando ya sea
tarde para alcanzarlo!
Diego Lias
Creo que tu concepción del éxito, tiene mucho interés, por lo que conlleva de apoyo a los demás, para conseguir alcanzar el éxito colectivo, lo que da idea de universalidad en el concepto "éxito".
ResponderEliminarMuy bien. He leído todos tus artículos y me parecen muy acertados.¡go on!
Muchísimas gracias por leer todos mis artículos y por el ánimo.
EliminarMe parece maravillosa tu idea de EXITO, pero no creo, que en una sociedad egoista como en la que vivimos, haya muchos que crean que el éxito se basa en darse a los demás, o incluso sacrificarse por los demás. Mucho tendría que cambiar la sociedad para llegar al nivel de éxito que indicas.
ResponderEliminarCreo que tu concepto de los valores generosidad, altruísmo, etc. son incómodos para la generalidad de los humanos (cada vez menos humanos).
Espero que sigas indicándonos caminos para llegar a ser mejores. Un abrazo.
Si un día fuéramos todos totalmente egoístas, la Raza Humana se extinguiría. Por lo pronto nadie tendría hijos o si los tuviera no los cuidaría. Muy poca gente se acerca al totalmente bueno o malo, al resto sólo hay que frotarnos un poco para que brille lo bueno (a unos más y a otros menos). En la de Lista de Schindler se dice una frase del Talmut que me impactó "Quien salva una vida, salva al mundo entero". No intentemos cambiar al mundo. Con conseguir hacer brillar a una persona ya es un éxito, luego sigue con la siguiente.
EliminarEn cuanto a ser incómodo, me encantaría que fuera así. Significaría que remuevo algo. Ya he dicho que el buen ejemplo es incomodo e incluso insoportable para alguien que no lo hace bien.
Lo que escribo son mis reflexiones personales. Me está viniendo muy bien escribir para pensar. Indicar caminos es halagador, pero creo que es demasiado, lo que espero es que os abra una vía para reflexionar, aunque lleguéis a otras conclusiones. Pero sí, mi objetivo si que es que brillemos un poco más. Gracias.